domingo, 25 de marzo de 2012
jueves, 22 de marzo de 2012
EL RENACIMIENTO
El Renacimiento fue un proceso de transformación cultural que revirtió la condición de estancamiento y oscurantismo científico propiciada en Europa durante la Edad Media. Rompió con casi todos los conceptos e instituciones más importantes de aquel período. Mientras el Medioevo se concentraba en Dios y en el mundo divino, el Renacimiento ponía al hombre en el centro del universo, y se concentraba en el hombre y en el mundo tocado por él. Si el primero instaba a los hombres a juzgarlo todo por medio de la fe y la autoridad de la Biblia y de los filósofos de la antigüedad clásica, ya que la fe podía conceder un lugar privilegiado junto a Dios, es decir, la salvación, el segundo introducía a la razón como el medio por el que los hombres debían interpretar y analizar todas las cosas, para alcanzar por medio de ella el conocimiento y aumentar el poder de sí mismos sobre el entorno universal, extendiendo los límites del imperio humano sobre los territorios de la naturaleza.
Por consiguiente podemos considerar que el Renacimiento fue la base de la Filosofía y de la Ciencia Moderna. Sus efectos fueron incomparablemente buenos: la civilización occidental, que en la Edad Media era muy inferior culturalmente a la civilización árabe islámica y a las civilizaciones de Oriente, se transformó, en los únicos seis siglos que transcurrieron hasta la actualidad, en un organismo de Cultura y de Ciencia muchísimas veces superior.
Por consiguiente podemos considerar que el Renacimiento fue la base de la Filosofía y de la Ciencia Moderna. Sus efectos fueron incomparablemente buenos: la civilización occidental, que en la Edad Media era muy inferior culturalmente a la civilización árabe islámica y a las civilizaciones de Oriente, se transformó, en los únicos seis siglos que transcurrieron hasta la actualidad, en un organismo de Cultura y de Ciencia muchísimas veces superior.
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